La estrategia tradicional de 'The Fighter'

La estrategia tradicional de ‘The Fighter’

La estrategia tradicional de 'The Fighter'

Paramount es perfectamente consciente de lo mucho que gustan en EE UU las películas de boxeo: desde Más dura será la caída hasta El luchador, la sociedad americana siempre se ha reconocido en la metáfora de un hombre defendiendo su dignidad de cada golpe, cayendo a la lona y volviéndose a levantar. Y esa implicación ha tenido su consecuencia en los Oscar: las estatuillas a la mejor película de Million Dollar Babyy, sobre todo, Rocky, tienen mucho que ver con esto. Y este año tenemos otro intento: The Fighter, de David O. Russell.

Paramount está empezando en estos días a lanzar sus baterías para ver hasta dónde llega la cinta. De momento, tiene mucho ganado con la línea argumental: dos hermanastros que se unen para luchar por un imposible y que, por el camino, consiguen reunir a su familia, redimir sus pecados y devolver a su pueblo el orgullo perdido. Con esa sinopsis y diez plazas en la candidatura a mejor película, muy mal se les tendría que dar para no figurar entre ellas.

La victoria en ese apartado es harina de otro costal, porque hay candidatos tan sólidos como La red social o El discurso del rey. La productora lo sabe pero también que un puñado de nominaciones puede alimentar la vida comercial de la cinta, que se estrena el 10 de diciembre. Su estrategia es clara: insistir en la solidez del relato (dirección, guión, montaje) y en el enorme esfuerzo de sus actores (Mark Wahlberg, Christian Bale, Amy Adams y Melissa Leo). Para remachar este segundo aspecto, han lanzado un clip en el que escuchamos a Mark Wahlberg y Melissa Leo con un tremendo acento irlandés y a Amy Adams rompiendo con su imagen de chica dulce. Acentos y cambios de imagen, dos de los aspectos que más gustan en la Academia. Paramount sabe lo que se hace.