Garbo, el espía (El hombre que salvó el mundo)

Madrid, 1940. Juan Pujol, autodidacta, gerente de una granja de pollos y conserje de hotel empieza a planear su contribución al «bienestar de la humanidad». Decide ofrecerse a los británicos para «echarles una mano», pero su ingenuo plan fracasa. Lejos de desanimarse y abandonar, consigue convencer a los nazis de que puede espiar para ellos. Sorprendentemente, el Abwehr confía en él y lo contrata. Nombre clave: Arabal. Después de una serie de aventuras, Pujol es localizado por la Inteligencia Británica, que le convierte en agente doble. Nombre en clave: Garbo. Desde Londres, hace creer al Tercer Reich que Normandía no es más que una estrategia de engaño, ya que el verdadero desembarco tendrá lugar en el Paso de Calais. Treinta años más tarde, un escritor inglés de novelas de espías, Nigel West, empieza a dudar de su muerte, se pone a buscarle, y le localiza en Venezuela, donde ha iniciado una nueva vida, se ha vuelto a casar y trabaja como profesor de inglés para la Shell. Nadie en su entorno sabía de su participación en la guerra.