Los cortometrajistas se enfadan con la Academia

En El País:

Las asociaciones de cortometrajistas están soliviantadas. Los
correos electrónicos han invadido el servidor de los responsables de la
Academia pidiendo información ante esta nueva política [de sacar los cortos de la entrega de los Goya], que consideran
errónea e injusta. La Plataforma de Difusión de Cambalache
Producciones, dedicada a la promoción del cortometraje, emitió ayer un
comunicado en el que se muestra indignada por la decisión de la
Academia.

"Es la gota que colma el vaso", dice el comunicado, que añade
que el cortometraje español "está muy lejos de ser un formato en manos
de unos cuantos adolescentes aficionados que corren de aquí para allá
con una cámara digital". Se trata, según el escrito, de un medio de
expresión cuyos creadores "no entienden el cine por su duración sino
por su calidad".

Desde la Agencia del Cortometraje Español (ACE)
también se pidió una rectificación a la Academia. Miguel Ángel
Escudero, director de cortos y responsable de la ACE, aseguró ayer a
este periódico que "el cortometraje tiene que ir siempre unido al
largometraje". "La única difusión de cara a la opinión pública que
tiene nuestro trabajo es en la gala de los Goya. Si ya nos quitan esos
minutos para llegar a una audiencia mayor, nos volveremos aún más
invisibles de lo que somos".

La Academia de Cine ha tomado esta
decisión, según han explicado sus responsables, para continuar con la
política de agilizar la gala de los Goya. En la última ceremonia,
celebrada en enero pasado, se recortó el tiempo total en 30 minutos y
se fijó una duración máxima de los agradecimientos de los distintos
premiados. Prescindir del espacio destinado a los premios a los
cortometrajistas -se dan tres galardones: mejor corto de ficción, mejor
corto de animación y mejor corto documental-, así como eliminar de la
gala el premio a la mejor película europea incidiría en esta política
de ahorro del tiempo. Un jurado ya ha elegido a los cortos propuestos
en cada una de las tres categorías para este año. Los ganadores se
darán a conocer el próximo 17 de diciembre.

Entonces, ¿adónde
irán a parar los cortos? Pues a la gala de candidatos, que se celebra
unos días antes de la ceremonia oficial. La razón aducida es que de ese
modo los cortometrajistas serán los verdaderos protagonistas de la
fiesta. "La gala de nominados tal y como estaba configurada no tenía
ningún sentido", aseguró ayer la directora de la Academia, Ana Arrieta.
"Pensamos que había que mejorar esta gala y hacer algo parecido a los
Oscar". La anunciada gran noche de los cortometrajistas tomaría la
forma de una cena de etiqueta. La Academia se mostró, en todo caso,
dispuesta a reconsiderar la decisión para "no dañar a nadie".