Primeras consecuencias de los premios de la crítica

Los primeros premios de la crítica que se han fallado este año han servido para unas pocas cosas: han afianzado las opciones de No es país para viejos; han repescado a Pozos de ambición, que andaba un poco descarriada; y han destronado a Cate Blanchett como única candidata a mejor actriz de reparto al colocarle a Amy Ryan como gran rival. Aunque tampoco hay que desdeñar el espaldarazo que han dado a La escafandra y la mariposa, una película cuyo papel en los Oscar sigue siendo incierto. Y una cosa: han logrado que I'm Not There haga honor a su nombre.

Por cierto, que algún lector ha mostrado su extrañeza por nuestro empeño en no incluir los premios otorgados, por ejemplo, por los criticos de Washington o los online de Nueva York. No lo hacemos porque tradicionalmente sólo prestamos atención a los tres paneles locales que gozan de prestigio indiscutible: Boston, Los Ángeles y Nueva York (que anuncia esta tarde). Nos parece que se percibe mejor el estado de la carrera realizando esa criba. De hecho, por ejemplo, en Washington se ha repetido el triunfo de No es país para viejos, lo que aporta muy poca novedad.

Y también alguno nos ha pedido actualizaciones de nuestras prevsiones del Oscatlón. Salvo la inclusión de Amy Ryan en la carrera por el premio a la mejor actriz de reparto, el resto de modificiaciones las haremos cuando tengamos todos los premios de la crítica lo que, además, coincidirá en el tiempo con las nominaciones a los Globos de Oro. Tranquilidad ante todo, que aún falta más de un mes para las candidaturas a los Oscar.