Se acaba de conocer el palmarés de la 58º edición de la Berlinale, siendo destacable el premio al mejor director que ha conseguido Paul Thomas Anderson por su labor en Pozos de ambición, película por la que compite como director y guionista en los Oscar. A pesar de que su cinta ha sido una de las más alabadas en la Berlinale, Pozos de ambición no ha podido ganar el premio a la mejor película que ha recaido finalmente en la brasileña Tropa de elite.
Paul Thomas Anderson ya ganó en 2000 el Oso de Oro a la mejor película por Magnolia en el Festival de Berlín.