Liliana Torres: «Family Tour es una catarsis artística y emocional»

Family Tour, un largometraje producido por la ESCAC (fuente inagotable de talento nacional), es un trabajo íntimo y personal por parte de una directora que firma con esta su primera cinta, Liliana Torres.

Para esta aventura, Liliana ha decidido bucear en el seno de su familia y contar una historia personal a través de un reflejo de si misma que bien podría ser el espejo de toda una generación. Solamente ha contado con una actriz profesional, Nuria Gago (Noviembre, Primos), que interpreta a Liliana, una joven directora española que regresa durante unos días de su estancia en México para visitar a su familia.

«Yo escribo guiones por encargos y sé lo que es crear una película desde una investigación previa, pero para mis proyectos personales me interesa más que el trabajo sea una catarsis tanto artística como emocional. Que yo decidiera coger a toda mi familia y hacer una película salió de mi casi sin que yo lo decidiera», cuenta Torres. Y añade, sobre trabajar con toda su familia y no con actores profesionales, que «se debe a que los personajes estaban inspirados en ellos y esos matices no los iba a poder conseguir del todo igual en los actores. Y ya que era una experiencia tan personal, pensé que sería buena idea completarla de la forma más auténtica posible. Hicieron falta muchos más ensayos y no es como con Nuria, con la que solo hubo que debatir y hablamos un mismo lenguaje, pero fue una experiencia muy agradecida».

Liliana es una joven que intenta vincularse con su familia, pero su realidad es muy distinta: ella es directora en México y su vida poco tiene que ver con lo costumbrista del ambiente en el que se mueven sus familiares. Todo hace pensar que lo que vemos es el fiel reflejo del mundo de Liliana Torres en lo que casi podría ser considerado un falso documental. «Mi familia es así, tal como se ven. Obviamente ciertas características y situaciones se potencian en algunos momentos para crear una ficción, pero muchas anécdotas son vivenciales. Y por supuesto la trama es algo que nunca existió, algo que yo he creado para poder transmitir el mensaje de la película», explica Torres.

Un mensaje, el de Family Tour, marcadamente generacional, que funciona sobre todo cuando el espectador se siente identificado con el regreso al seno familiar cuando su ambiente se ha convertido en algo totalmente opuesto. «El personaje principal es difícil en cuanto a la implicación con él, porque está viviendo un proceso del que necesita despertar, una neurosis que le hace estar lejos de su familia. Yo quiero que tanto la gente de nuestra generación como la de otras se vayan con la idea de que hay que abrirse a los demás, y que no se puede vivir de forma elitista pensando que uno es siempre el incomprendido», concluye Torres.