La ya veterana en estos premios Modern Family y la recién llegada Homeland han sido las dos grandes triunfadoras de la noche, sumando cuatro premios Emmy en total. También se ha marchado con cuatro premios Game Change, la gran favorita en las categorías de miniserie o telefilm. En general, la noche ha transcurrido sin demasiadas sorpresas, salvo en las categorías de actores masculinos principales, donde Jon Cryer ha sorprendido en comedia y Damian Lewis en drama. La gala ha durado unas tres horas, durante las cuales ha reinado la comedia y algún que otro sketch muy inspirado, como el maravilloso clip protagonizado por Aubrey Anderson-Emmons, la jovencísima actriz que interpreta a Lily en Modern Family.
Modern Family se ha alzado, por tercer año consecutivo, como la absoluta ganadora de los premios Emmy en las categorías de comedia, llevándose un total de cuatro premios, los de mejor actor secundario para Eric Stonestreet, mejor actriz secundaria para Julie Bowen, mejor dirección en comedia para Steven Levitan por su trabajo tras las cámaras en «Baby on Board», el capítulo final de temporada, y, por supuesto, el premio en la categoría reina, mejor serie en comedia. De este modo, Modern Family solo disminuye en uno su cosecha de premios con respecto al año pasado, puesto que en esta ocasión no se encontraba entre los nominados a mejor guión. En cuanto los actores principales en comedia, los afortunados han sido Jon Cryer por Dos hombres y medio, convirtiéndose en el primer actor que consigue el Emmy como mejor actor secundario y principal por el mismo papel, y Julia Louis-Dreyfus por Veep, que con este consigue su tercer Emmy por tres roles diferentes y consecutivos. El premio al mejor guión en comedia ha ido a parar a Louis C.K. por «Pregnant», el primer episodio de la segunda temporada de Louie.
Homeland ha sido la gran triunfadora en cuanto a los premios en drama, llevándose el premio como mejor drama del año y evitando así que Mad Men se hiciera con su quinto Emmy consecutivo en esta categoría. Además, también han conseguido el Emmy Claire Danes y Damian Lewis por sus respectivos papeles protagonistas en la serie y Alex Gansa, Howard Gordon y Gideon Raff por el guión del episodio piloto, sumando así un total de cuatro premios, los mismos que Modern Family. Los mejores actores secundarios en drama han sido Aaron Paul por Breaking Bad, ganando así su segundo Emmy por su papel como Jesse Pinkman, y Maggie Smith, quien ya recibió el año pasado el premio a mejor actriz secundaria en miniserie o telefilm por el mismo papel cuando Downton Abbey se presentaba en esa categoría. El Emmy a la mejor dirección del año ha ido a parar a manos de Tim Van Patten por «To The Lost», la season finale de Boardwalk Empire.
En cuanto a las categorías de miniserie o telefilme, la noche ha transcurrido sin muchas sorpresas, proclamando como absoluta ganadora a la que estaba en boca de todos, Game Change. En total se ha alzado con cuatro premios, el de mejor guión en miniserie o telefilm para Danny Strong, mejor dirección para Jay Roach, mejor actriz principal para Julianne Moore y, por supuesto, el premio gordo, el de mejor miniserie o telefilm del año. Por su parte, Jessica Lange se ha hecho con el premio más cantado de la noche, el de mejor actriz secundaria en miniserie o telefilm por American Horror Story, mientras que los premios a mejor actor principal y secundario han ido a parar a Hatfields & McCoys, para Kevin Costner y Tom Berenger respectivamente.