Brett Ratner ha presentado su dimisión como productor de la ceremonia de los Oscar esta tarde tras la polémica suscitada por sus comentarios de tinte homófobo el pasado fin de semana en Los Ángeles que suponen la gota que colma el vaso en un cúmulo de declaraciones no del todo acertadas. Tom Sherak, presidente de la Academia, asegura que «Ha hecho lo correcto para la Academia y para él mismo»
«Las palabras tienen un significado, y tienen sus consecuencias», continúa el comunicado. «Brett es una buena persona, pero sus comentarios han sido inaceptables. Todos esperamos que esta sea una oportunidad para crear la conciencia del daño que causan las declaraciones irresponsables e insensibles, independientemente de la intención que tengan.» La polemica surgía el fin de semana pasado durante la celebración de un coloquio en Los Ángeles en el que Ratner aseguró que él no realizaba ensayos en sus película, que los ensayos era para «maricones».
A estas declaraciones que ya le pusieron en el punto de mira, se añaden otras anteriores en las que dejaba entrever que mantuvo una relación con la actriz Olivia Munn, haciendo probar su hombría asegurando que «se la tiró» («bang» en el original inglés). Brett Ratner quiso retractarse de sus palabras sobre Munn frente a la estrella de la radio y la televisión Howard Stern, pero por si fuera poco, desveló que una vez forzó a Lindsay Lohan a hacerse una prueba para comprobar si tenía enfermedades de transmisión sexual cuando ella era «muy joven».
«Ha sido una forma tonta de expresarme. Todo el que me conoce sabe que no tengo ni un solo prejuicio. Pero como contador de historias, debería haber pensado mucho más el poder del lenguaje y la elección de mis palabras», ha asegurado Ratner en su comunicado de disculpa que ha publicado en forma de carta abierta a la industria en la que explica los motivos de su decisión.