Estos días ante la posibilidad de que la Blancanieves de Pablo Berger sea elegida por la Academia como la presentante española en los próximos Oscar, llega repetidas veces la pregunta de si una película muda es elegible en una categoría definida por el idioma de sus diálogos.
Lo más curioso del caso es que esas dudas se fundamentan especialmente en el hecho de que Francia no enviara el año pasado la muda y finalmente multipremiada The Artist, sino que optara por Declaración de guerra, de Valérie Donizelli.
Lo cierto es que había varias razones para no elegir The Artist, aunque la más sencilla era su inegibilidad por la fecha de estreno. Llegó a los cines franceses el 12 de octubre de 2011, cuando la horquilla para competir por el Oscar a la mejor cinta de lengua extranjera va de octubre del año anterior al septiembre del actual.
De lo que surge una pregunta inmediatamente: ¿puede Francia enviar The Artist este año? Pues si sólo fuera por la fecha, sí. Sin embargo, hay algo más, que es lo que nos trae aquí: el idioma.
Las normas de la Academia de Hollywood no prevén nada específicamente para las cintas mudas, es decir, hay que aplicarles el criterio general: que la mayor parte de los diálogos estén en un idioma distinto del inglés. ¡Pero si es muda! Cierto, pero eso no la hace carente de idioma original porque aún están los intertítulos y, si no hay nada más, en una interpretación extrema de la norma, nos quedan los créditos.
Si alguien considera que el idioma de los intertítulos es fácilmente modificable para convertirla inmediatamente en elegible, se equivoca porque ese caso sí está previsto, aunque de nuevo pensado para los diálogos hablados. Se considera idioma original aquel en el que la película esté estrenada de forma general en su país de origen.
Aplicando todo esto a Blancanieves, efectivamente, la cinta de Pablo Berger es perfectamente elegible por muda que sea. Se estrena en fecha y sus rótulos están escritos en castellano.
Y para terminar de despejar dudas: El artista y la modelo, de Fernando Trueba, puede también competir a pesar de estar en Francés, un idioma distinto al del país que representa. La Academia no señala nada sobre si el idioma ha de ser o no el oficial del país de origen. Basta con que no sea inglés.