Tras la entrega este fin de semana de los Emmy creativos, continuamos el repaso por las principales categorías de estos premios. Y lo hacemos fijándonos en dos de los apartados estrellas: mejor miniserie, en el que tan sólo compiten dos producciones; y mejor telefilm, en la que tres películas tratan de pararle los pies a Grey Gardens.
Mejor miniserie
La peculiaridad de que tan sólo haya dos candidatas al Emmy a la mejor miniserie no ha de confundirnos: la pelea está muy abierta entre dos producciones de signo opuesto.
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Generation Kill, de HBO, producida por Company Pictures y Blown Deadline Productions
Una de las principales apuestas de HBO para la temporada, Generation Kill es una miniserie de siete episodios creada por los responsables de la reverenciada The Wire y que cuenta la experiencia de un reportero de la Rolling Stone empotrado en el regimiento de marines que tomó Bagdad en 2003. Sin duda, se trata de una producción magníficamente rodada pero que aborda un tema muy delicado y controvertido para el espectador estadounidense: no todo el mundo está dispuesto a echar un vistazo a cómo es de verdad la vida de unos chavales convertidos en soldados, donde el heroísmo y la lucha por los valores no representan las virtudes más comunes. A favor tiene que es la candidata nacional proque su rival es una superproducción británica.
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Little Dorrit, de PBS, producida por BBC y WGBH Boston
Originariamente producida por la BBC británica y emitida ahora en la cadena pública estadounidense, Little Dorrit es, por el momento la serie más premiada de esta edición de los Emmy al haberse llevado ya los premios al mejor reparto, fotografía, dirección artística (ex aequo con Grey Gardens) y vestuario. Se trata de una adaptación a la pequeña pantalla de una de las obras de Charles Dickens menos conocidas en España, aunque sí resulta familiar para el público británico. Consta de 14 episodios, cinco entregas menos que la novela original que, como era habitual en la época y más en el caso de Dickens, tuvo su primera edición en cuadernillos mensuales. La producción, sin duda, refleja el buen hacer de la BBC en este terreno, aunque puede resultar demasiado inglesa para los votantes. De hecho, los premios que ya tiene son, precisamente, los apartados donde más brilla al tratarse de una serie de época, pero lo va a tener mucho más complicado en la categoría principal.
Quién debería ganar: Generation Kill
Mejor telefilm
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Coco Chanel, de Lifetime, producida por Lux Vide, Pamp Productions y Alchemy Television Group
En el año en que Gabrielle Bonheur hubiera cumplido los 125, varias producciones han querido acercarse a la figura de la creadora más importante en la historia de la moda. Pero esta Coco Chanel (como la película Coco avant Chanel de título español tan largo que no cabe en este artículo) se quedan muy lejos de la excelencia del personaje al que retratan y se conforman con una mediocridad sólo apta para programaciones de sobremesa poco exigentes. El único interés de esta película es ver a Shirley MacLaine en el papel de la modista.
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Grey Gardens, de HBO, producida por Specialty Films y Locomotive
La producción más esperada del año quizá no haya satisfecho todas las expectativas, pero sin duda ha cultivado suficientes simpatías como para seguir siendo la favorita. Este Grey Gardens partía con desventaja porque medirse con el Grey Gardens original, el documental de los hermanos Maysles, es una tarea imposible. Lo hemos dicho aquí alguna vez: se trata, en opinión de este cronista, de una de las mejores, más extrañas y más emotivas películas de la historia del cine. Por tanto, la película que recrea los personajes originales, sus singulares vidas y su inolvidable filosofía no podía estar a la altura, pero al tiempo se beneficia de ingredientes tan exquisitos. Sería muy raro que no figurara su nombre en la chapita del premio.
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Into the Storm, de HBO, producida por Scott Free y Rainmark Films
Pero si Grey Gardens tiene un adversario ese es Into the Storm. Y lo tiene dentro de casa pues se trata de una coproducción de HBO con la BBC, secuela de The Gathering Storm (2002). Si esta narraba la relación del matrimonio Churchill en los años del ascenso del nazismo, la nueva entrega se centra en los años de la Segunda Guerra Mundial. Han cambiado los actores (Brendan Gleeson y Janet McTeer en lugar de Albert Finney y Vanessa Redgrave) pero lo demás sigue intacto: una producción de gran nivel, basada en un sólido guión y construida con buenas interpretaciones. The Gathering Storm logró tres Emmy (mejor telefilm, actor y guión), pero habrá que ver si una segunda parte es capaz de repetir la hazaña.
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Prayers For Bobby, de Lifetime, producida por Once Upon the Times Films en asociación con Permut Presentations y Sladek Taaffe Production
Prayers for Bobby es la cinta comprometida de esta selección: la historia de una mujer que rechaza a su hijo homosexual para terminar siendo una activista por los derechos de los gays después de aprender la lección con sangre: el chaval, incapaz de asumir la discriminación, se suicida saltando desde un puente. Sigourney Weaver hace el papel de la típica madre coraje y la cinta rezuma moralina por los cuatro costados. Todo muy correcto, muy blandito, muy de telefilm.
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Taking Chance, de HBO, producida por Motion Picture Corp. of America y Civil Dawn Pictures
Si decíamos que Generation Kill, la candidata a mejor miniserie, no es de fácil digestión para una parte del público, no digamos la cantidad de bicarbonato que deben necesitar los espectadores más conservadores para enfrentarse a Taking Chance, una descorazonadora película sobre un teniente coronel encargado de llevar de vuelta a casa el cuerpo de un soldado muerto en Irak. Si durante años se ha estado ocultando a la opinión pública las simples fotografías de los féretros, esta película basada en un caso real y coescrita por quien la protagonizó, viene a ser una bofetada de realidad. Y como tal, muchos querrán zafarse de ella.
Quién debería ganar: Grey Gardens