También la lluvia

Sebastián y Costa, ambos en la treintena, se han propuesto hacer una película sobre uno de los grandes iconos mundiales, Cristobal Colón. Mientras que Sebastián quiere como director darle la vuelta al mito y presentar al Colón obsesionado por el oro, cazador de esclavos y represor de indios, a Costa solo le importa sacar la película adelante con el modesto presupuesto del que disponen, incluso si para ello hay que rodar en Bolivia, uno de los países más baratos y con mayor población indígena de América Latina. Costa, Sebastián y su equipo van a rodar a la ciudad de Cochabamba y alrededores, donde la privatización y venta del sistema de aguas de la ciudad a una multinacional está sembrando el descontento entre sus habitantes. La película avanza con dificultad mientras la violencia crece de día en día hasta que toda la ciudad explota en la tristemente famosa Guerra Boliviana del Agua (ocurrida en la realidad en abril del año 2000). 500 años después de Colón, palos y piedras se enfrentan de nuevo al acero y la pólvora de un ejército moderno. Solo que esta vez no luchan por el oro, sino por el más simple de los elementos vitales: el agua. Pasado y presente, ficción y realidad, se mezclan y toman forma a través de las decisiones y del enfrentamiento entre dos hombres jóvenes cuyas conciencias les guiarán hasta donde nunca hubieran imaginado.