«Caracremada» (Caraquemada, en castellano), apodo utilizado por la guardia civil para referirse a Ramon Vila Capdevila, reflexiona sobre la resistencia libertaria al régimen de Franco a través del que fue su último guerrillero en activo. Cuando en el año 1951 la CNT decretó la retirada de sus hombres, Ramon Vila permaneció en los bosques del interior de Cataluña para reemprender en solitario su lucha.