Fernando Trueba presentó ayer en el Festival de San Sebastián su nueva película, El artista y la modelo, con la que vuelve a competir en el certamen donostiarra tras El baile de la victoria. Esta nueva cinta llega tras años de rondarle la cabeza, lo mismo que la secuela a La niña de tus ojos, cuyo guión ahora escribe y que estará protagonizada y producida por Penélope Cruz.
Trueba (Madrid, 1955) ha querido que El artista y la modelo sea un reflejo de sí mismo –“los amigos me reoconcen en el protagonista, lo confieso”-, de su concepción del arte, del arte que admira –no sólo cinematográfico- y de su amor por Francia. Tanto es así que con guión de Jean-Claude Carrière y protagonizada por Jean Rochefort, podría decirse que esta es la película francesa de Fernando Trueba.
«Creo que las películas no tienen nacionalidad”, asegura. “Mi filmografía es una prueba de ello. Voy rodando por -Cuba, Miami, Praga, Chile, Salvador de Bahía… Soy una especie de disparate humano andante. Unos personajes son españoles, otros son franceses, ocurre en el sur de Francia… ¿Es una película española? ¿Es francesa? ¿Es una película del Pirineo? No lo sé”.
“Pero toda la vida me he confesado muy afrancesado”, confiesa. «Cuando era niño y vivía en un país en el que todo estaba prohibido a través de Francia me pude acercar a muchas cosas que en España no estaban disponibles. Debo mi cultura al idioma francés. Para mi era ese país que estaba cerca pero donde había libertad».
El proyecto de La artista y la modelo ronda por la cabeza de Trueba desde hace muchos años. «Siempre la iba aparcando porque me decía que tenía que ser más viejo para hacerla. Hasta que un día me dije: ‘Ojo, que ya eres bastante viejo y a ver si un día te atropella un coche o se te cae una cornisa encima y te quedas sin hacerla’. Porque no todos vamos a llegar a la edad de Manoel de Oliveira rodando”, bromea.
“Es bonito dejar crecer una película dentro de ti, que todo sea natural, orgánico, que nada esté forzado”, añade. “Cuando a final de año me compro la agenda, lo primero que hago no es pasar los cumpleaños de los familiares, es la lista de películas que sueño con hacer. ‘Esta la tacho que ya la he hecho. Esta no, que realmente no se sostiene’. Y todas las demás las paso, así que hay algunas que estás años con ellas».
Una de esas que pasa de una agenda a otra es la secuela de La niña de tus ojos: «No pensé que fuera a hacerlo, pero sí que de vez en cuando pensaba en qué le habría pasado a tal o cual personaje. Un día me levanté y había soñado un gag tan cojonudo de esa película que al despertarme por la mañana lo anoté. Y luego el resto de cosas que se me habían ido ocurriendo a lo largo de los años. Tenía unas cuantas y al escribirlas se me ocurrían otras. Además, se lo conté a Penélope y le encantó. Unos días más tarde me dijo que lo había esta pensando y que le gustaría participar en la producción de la película. ‘Tu misma…», cuenta irónicamente.
Aún está escribiendo el guión de esa película y, por ahora, en solitario. En cambio, el de El artista y la modelo lo trbasjó junto al maestro de guionistas Jean-Claude Carrière en su casa de París. » Iba a su casa por las mañanas. Charlábamos, escribíamos, comíamos juntos, seguíamos luego por la tarde… Ojalá no se hubiera acabado nunca porque era muy agradable. Es un hombre que empezó con Tati y trabajó mucho con Buñuel, y con Peter Brook, con Nagisa Oshima, con Godard, y Milos Forman, y Louis Malle, y Philip Kaufman… Es una filmografía bastante singular. Además. tiene libros sobre México, la India y España, tres países sobre los que es un gran experto; pero también sobre el vino y otro sobre Einstein. Y lo mejor de todo es que en ningún momento te hace sentir que estás sentado con la Enciclopedia Británica”.
Desde el principio, Jean Rochefort y Aida Folch estaba e su cabeza como los protagonistas. «Escribí pensando en ellos pero la química que han tenido no la podía ni imaginar. Es muy difícil que una chica tan joven como Aída y alguien como Rocheford que es de otra edad y otra cultura se lo pasen tan bien juntos. ¡Tenían una complicidad tan bonita! Pensaba que me había tocado la lotería. Eso ha ayudado mucho a la película».
Trueba tiene especial admiración al trabajo de Folch en la cinta. «Nunca le estaré suficientemente agradecido”, asegura. “Se fue a Francia por su cuenta y riesgo a aprender francés sin decirme nada. Sólo porque yo le había preguntado si hablaba francés. Desapareció a las dos o tres semanas y se fue a vivir allí. Me llamó varios meses después cfojo el teléfono y oigo: ‘Fernando? Tu vas bien…?’ Ni me daba cuenta de que era ella. ‘Estoy en Montpelier. ¿Te acuerdas de aquello que me dijiste? Pues me he fui a Aviñón a estudiar y ahora estoy aquí’. Y luego ha sido tremendamente generosa. Esta película es un monumento a Aída y se lo ha ganado centímetro a centímetro».
Completan el reparto la italiana Claudia Cardinale, la española Chus Lampreave y el alemán Götz Otto. «Cada miembro del reparto es de un planeta diferente y, sin embargo, todos conviven en esta historia. Estábamos rodando la escena en la que caminan las dos por el mercado por primera vez… Me decía: ¡nunca hubiera imaginado a Chus Lampreave y Claudia Cardinale juntas!».
El artista y la modelo se estrena en las salas de cine de toda España este próximo viernes, a la vez que Blancanieves, con la que compite por la Concha de Oro y la designación para representar a España en los Oscar. ¿Hay rivalidad entre ellos? «El jueves nos fuimos a comer Rebollo, Pablo Berger y yo”, cuenta. “Nos lo pasamos muy bien, nos contamos unas cuantas cosas y nos fuimos. Yo nunca compito, estoy por debajo de todas esas cosas».