Esta tarde se anunciarán las nominaciones a los Independent Spirit y a los premios Annie de animación. El jueves, la National Board of Review dará su fallo con los primeros ganadores del año. Aquí arranca la temporada de premios de 2009, un año que está resultando bastante peculiar con, por un lado, la fuga de estrenos importantes a 2010 y, por otro, la ampliación de los Oscars a 10 categorías.
Los Independent Spirit, los galardones que abren fuego en Estados Unidos cada año, van a sufrir una drástica pérdida de influencia en la carrera por los Oscar, algo que ya se empezó a intuir el año pasado. La razón es que la práctica totalidad de los estudios han echado el cierre a sus divisiones de cine independiente, es decir, a sus filiales que hacían películas con menor presupuesto. Muchas de estas empresas habían sido previamente compañías verdaderamente independientes. Ahora, esquilmado el panorama de la producción fuera de Hollywood, pocos títulos relevantes pueden competir en los Independent Spirit.
Por su parte, la National Board of Review tiene la virtud de elegir la primera película ganadora del título de la mejor del año. Sin embargo, pocas veces coincide con la elegida finalmente por la Academia. En cualquier caso, lo que sí hace esta asociación es escoger las diez mejores películas del año, igual que harán los Oscar a partir de ahora. No va a ser un filtro, ni mucho menos un filtro definitivo, pero sí una buena guía para la carrera, dada la escasez de grandes títulos esta temporada.
Tampoco los Annie son un referente infalible. El año pasado, por ejemplo, Kung Fu Panda logró 17 nominaciones frente a las 7 de Wall·E, del que no cabía ninguna duda que era el título del año. Esta vez, en que tenemos un panorama con 20 películas animadas estrenadas en EE UU, quizá los Annie puedan ayudar a decidir qué título cerrará el quinteto de los Oscar junto a Up, Tiana y el sapo, Coraline y Ponyo.