La batalla por el Emmy a la mejor actriz de miniserie es seguramente la más previsible de este año. ¿Quién puede batir a Julianne Moore personificando a Sarah Palin en Game Change? Poco margen para la sorpresa tienen Connie Britton, perfecta en American Horror History; o Nicole Kidman, poco estimulante en Hemingway & Gellhorn. Más complicado todavía lo tienen Ashley Judd buscando a su hijo desaparecido en Missing y Emma Thompson declamando un texto laberíntico en The Song of Lunch.
Connie Britton por American Horror Story
A priori, Connie Britton es la actriz menos popular de las cinco candidatas, pero no por ello la que cuenta con menos opciones. Tal vez todo lo contrario porque American Horror History tendría poco que hacer sin su Vivien, el personaje que pone en marcha la serie percibiendo que en esa casa no todo es paz y harmonía. Es la tercera nominación consecutiva para Bitton, después de dos años seguidos luchando por el Emmy a la mejor actriz dramática con Friday Night Lights.
Ashley Judd por Missing
Puede parecer una contradicción, pero Ashley Judd es el patito feo de esta categoría. Su nominación por Missing, en la que interpreta a una ex agente de la CIA que ejerciendo de madre coraje en Italia se ve envuelta en una conspiración internacional, ha sido seguramente la menos comprendida de las cinco. En cualquier caso, es la segunda vez que Judd aspira a un Emmy, después de que en 1996 optara en esta misma categoría por el telefilm Norma Jean y Mariln, en el que desdoblaban a la Monroe y ella daba vida a la versión original, morena y pre estrella de Hollywood.
Nicole Kidman por Hemingway & Gellhorn
Nadie dudaba de que Hemingway & Gellhorn trería la primera nominación a los Emmy de Nicole Kidman. La estrella australiana da vida de forma perfectamente rutinaria a Martha Gellhorn, una de las corresponsales de guerra más famosas de la historia. La película abarca su relación con Ernest Hemingway, con quien decidió venir a España a cubrir la Guerra Civil y con quien terminó casándose en 1940. El trabajo de Kidman es tan interesante como el conjunto: nada. Un lástima.
Julianne Moore por Game Change
Pareciera que el anuncio de que Julianne Moore iba a interpretar a Sarah Palin viniera grapado con el del Emmy a la mejor actriz de miniserie. Desde luego, es una ocasión como pocas: una actriz de talento universalmente reconocido interpretando a un personaje político de inmensa proyección y escasa categoría. Moore, sin duda, tomó el toro por los cuernos y lo ha doblegado: no sólo se parece físicamente, sino tiene los gestos, las miradas y los tonos no tanto de la Palin auténtica como de la que imaginamos, que es todavía más real.
Emma Thompson por The Song of Lunch
Después de hablar de Moore/Palin poco importa ya que la gran Emma Thompson aparezca en esta lista. Su trabajo en The Song of Lunch es sobresaliente, pero parte con un durísimo handicapen unos premios televisivos: esto no es otra cosa que teatro filmado, sin disimulo ni ambiciones cinematográficas.Emma Thompson y Alan Rickman sentados a la mesa de un bar declamando textos retóricos. Impecable y delicioso, pero teatro al fin y al cabo.
Ganará: Julianne Moore por Game Change
Debería ganar: Julianne Moore por Game Change