Los Globos de Oro sucumben a ‘La gran estafa americana’

Como no podía ser de otra manera, la edición número 71 de los Globos de Oro comenzaba con el monólogo inicial de las dos maestras de ceremonia, Tina Fey (Saturday Night Live, 30 Rock) y Amy Poehler (Parks & Recreation). Tras el éxito de la gala del año pasado que ellas mismas presentaron, habrían sido renovadas para repetir la tarea tanto este año como el que viene, algo que no se les ha escapado en su monólogo y han aprovechado para decir que como el año pasado gustaron, repetirán hasta que las odiemos.

El discurso ha estado protagonizado por los nominados presentes en la sala, según Fey y Poehler, un plantel de famosos que supera con creces el que nos hemos encontrado en los últimos años. Al fin y al cabo, los Globos de Oro van de esto. Con su habitual gracia, han tenido palabras para todo: desde la edad de las novias de George Clooney hasta los falsos genitales de las chicas de La vida de Adèle o El lobo de Wall Street, pasando por un divertido plano de Jennifer Lawrence fingiendo que era la propia Amy Poehler.

La gran estafa americana ha resultado la indiscutible triunfadora de la noche en el terreno cinematográfico, llevándose a casa tres de los premios gordos de la noche. Abría la gala recibiendo el premio a la mejor actriz secundaria, que caía en Jennifer Lawrence, quien ya ganó el Globo de Oro el año pasado por El lado bueno de las cosas, y lo remataba con el premio a la mejor actriz principal para Amy Adams y el de mejor comedia o musical.

De cerca le ha seguido Dallas Buyers Club, el drama sobre el VIH protagonizado por Matthew McConaughey y Jared Leto que ha conseguido un Globo de Oro para cada uno de sus actores, el primero ha sido coronado como mejor actor protagonista en drama y el segundo mejor actor secundario. Si bien lo de McConaghey no es tan resolutivo, sí empieza a parecer claro que el Oscar al mejor actor secundario también caerá en manos de Jared Leto.

Por su parte, los dos largometrajes dramáticos que partían como favoritos de cara a los premios gordos, 12 años de esclavitud y Gravity, han resuelto la noche con empate: mejor director para Alfonso Cuarón por Gravity y mejor película para la cinta de Steve McQueen. Her, de Spike Jonze, ha ganado el Globo de Oro al mejor guión y Leonardo DiCaprio ha sido elegido mejor actor protagonista en comedia, relanzando sus posibilidades de estar en el quinteto de actores nominados al Oscar. Por último, Cate Blanchett ha cumplido todos los pronósticos y ha subido, flamante, a recoger su premio como mejor actriz dramática por su neurótica Jasmine.

Los premios de música en las categorías de cine han sido dos auténticas sorpresas: la mejor partitura no ha ido a parar a manos del favorito, Hans Zimmer, sino que ha sido el único premio de la noche para Cuando todo está perdido, la que ha sido su primera composición para un largo de ficción. El premio a la mejor canción tampoco ha sido para la favorita, en este caso Let it go, el tema interpretado por Idina Menzel en la que ya es la segunda película más taquillera de la historia de la Disney. En su lugar ha ganado el tema compuesto por Bono (U2) para el biopic Mandela: Del mito al hombre.

Frozen: El reino del hielo ha sido coronada como mejor película de animación del año, aunque su mayor rival de cara al Oscar, Se levanta el viento, no participaba en esta categoría porque las reglas de los Globos no se lo permitían, así que estaba nominada a mejor película extranjera. Pero la última película del realizador japonés Hayao Miyazaki tampoco ha conseguido hacerse con el Globo de extranjera, categoría en la que ha triunfado La gran belleza, de Paolo Sorrentino.

Tras el monólogo inicial, Poehler y Fey no han tenido demasiada presencia a lo largo de la gala, pero han conseguido amenizar uno de los momentos más absurdos y aburridos de la ceremonia: el del nombramiento de Miss Golden Globe, sacándose de la manga un Mister Golden Globe que no era otro que Amy Poehler con traje.

En las categorías de televisión las dos rotundas ganadoras han sido Breaking Bad y Brooklyn Nine-Nine. La primera ha cerrado su andadura por la puerta grande, tras finalizar definitivamente el pasado mes de septiembre y triunfar en los Emmy ha confirmado que es el mejor drama del año haciéndose con los Globos de Oro a la mejor serie dramática y mejor actor protagonista para Bryan Cranston. Por poco no ha hecho pleno, ya que Aaron Paul cedió su premio al mejor actor secundario a John Voight, que ha ganado por su trabajo en Ray Donovan.

En el caso de Brooklyn Nine-Nine, la comedia que ha elegido FOX para su preciado hueco en la parrilla tras la Superbowl ha conseguido los premios a mejor comedia y mejor actor protagonista en comedia para Andy Samberg. En el terreno de las miniseries, Behind the Candelabra ha sido coronada como la mejor miniserie del año y Michael Douglas como mejor actor protagonista. No se ha olvidado de su compañero de reparto en el biopic de Liberace, Matt Damon, de quien ha dicho que no ha ganado el Globo de Oro simplemente por tener menos escenas que él.

El resto de premios en el terreno televisivo ha estado muy repartido: Jacqueline Biset ha ganado el Globo a la mejor actriz secundaria por Dancing on the Edge, una de las grandes sorpresas de la noche puesto que competía con gigantes como Jessica Lange o Helena Bonham Carter. Por último, Elisabeth Moss ha ganado el premio a la mejor actriz en miniserie o telefilm por Top of the Lake, Robin Wright ha hecho lo propio en la categoría de mejor actriz en drama por House of Cards -su discurso fue de los más breves y acertados- y la hilarante anfitriona, Amy Poehler ha visto por fin reconocido su trabajo a la cabeza de Parks & Recreation con el Globo de Oro a la mejor actriz principal en comedia.