Avatar
Compositor: James Horner Sello: Atlantic Duración: 1h 18′ 82» Lanzamiento: 15 de diciembre Escucha o compra este disco |
James Horner es para la música como el Mozart travieso de Amadeus. Horner, un compositor con muchísimo carisma que sin duda es una figura indiscutible de la historia de la música de cine, nos ha deslumbrado con su inconfundible sonido en piezas tan imprescindibles para todo coleccionista como Aliens, Braveheart, Leyendas de pasión, Star Trek II: La ira de Khan,The Spitfire Grill, Glory o Willow. Ha sido nominado nueve veces al premio de la Academia y ganado dos estatuillas (mejor partitura y canción original por Titanic). Pero con el éxito siempre llega la polémica. Y prácticamente desde sus inicios. Con Aliens fue cuando realmente empezó una meteórica carrera de laureles, en la que nos ha obsequiado con mucha de la mejor y más inolvidable música del cine. Pero Horner ha acabado prisionero de su propia música. Su decadencia en este milenio ha sido debida a su pasividad a la hora de encarar ciertos trabajos. Una indolencia que, con el surgimiento de frescos y magníficos compositores nuevos, al final le ha pasado una gran factura de cara a conseguir buenos proyectos y sólo ha logrado despuntar artísticamente con muy pocas partituras como Las crónicas de Spiderwick o Apocalipto. Su deslumbrante currículum le reserva todavía cierto prestigio en la industria, pero desde luego no entre los compositores.
El reciclaje de partituras y temas ha sido la guillotina de su carrera profesional. Si bien casi todos los músicos de cine no pueden evitar muchas veces hacer referencia a ciertos pasajes de su discografía cuando encaran un nuevo proyecto (en parte también, por la inercia de un estilo propio y definido), James Horner ha llevado esta máxima a terrenos moralmente cuestionables. Su desfachatez para el plagio ha hecho incluso que muchos músicos hoy en día no le dirijan la palabra, temerosos tal vez de encontrarse con temas suyos sutilmente cascados en una nueva partitura. Con todo, se cuida muy mucho de esconder sus tropelías ante otros músicos. Ahora, no tiene ningún reparo en calcar temas de películas suyas y vendérselo como material original a directores advenedizos. Hay miles de ejemplos, pero si queréis comprobarlo fácilmente sólo tenéis que escucharos los temas de El hombre bicentenario, Una mente maravillosa, Sneakers o En busca de Bobby Fisher. Todos tienen el mismo tema calcado, pero versionado por distintas orquestas. Un triste final para un músico que nos ha deleitado con muchos de los mejores momentos musicales en la gran pantalla. En 2001 por Una mente maravillosa y en 2003 por Casa de arena y niebla recibió sus dos últimas nominaciones, pero la tónica general ha sido ignorar todo lo que el americano componía por sistema.
{youtubejw width=»600″ height=»250″}34Wqi0FSLec{/youtubejw}
Suena ‘Becoming on Of The People/Becoming One Of The Neytiri’, de James Horner para Avatar
Avatar es su ocasión para redimirse. Y lo hace gracias al capote de James Cameron que le brindó con Titanic sus ansiados dos primeros y últimos Oscar (la Academia se había resistido siempre mucho a premiarle, incluso a nominarle). La campaña de publicidad de la Fox se ha encargado muy mucho de ensalzar las riquezas de esta partitura, en la que ha estado trabajando Horner en exclusiva durante más de un año, un milagro para cualquier compositor que normalmente suele gozar de apenas dos o tres semanas. Por tanto, visto el legado de Horner y el órdago de Cameron, parecía posible que Horner pudiera parir algo así como una gran partitura como las de los años ochenta. El resultado son tres horas de música que en su edición discográfica han quedado reducidas a 1 hora y 18 minutos (que ya es muchísimo). En términos artísticos, estamos ante una sólida propuesta musical de buen engranaje pero que sobre todo, viniendo de este hombre, es una absoluta decepción.
La partitura está concebida en trece pistas instrumentales larguísimas. Uno podría pensar al ver el compacto que podemos estar ante una colección de magnánimas cues, pero el resultado es que cada pista es un refrito de varias ideas yuxtapuestas por lo que en realidad es una partitura muy profusa en acciones musicales rápidas y sucesivas. Avatar tiene puntos fuertes y otros un tanto endebles, pero todos muy discutibles. En primer lugar, Horner ha hecho un gran esfuerzo por crear un lenguaje alienígena para los Na’vi, ayudado por el oscarizado técnico de sonido Christopher Boyes, y que funciona en los pasajes más corales de la partitura. También ha incorporado y combinado elementos instrumentales exóticos, como las flautas finlandesas, la música indonesia, distintos ingredientes percusivos bastante inusuales y sobre todo, una gran carga de voces graves, distantes y folclóricas. Todo esto ha sido remezclado con un importante número de sintetizadores que a buen seguro le han dado ese toque retro. Este trabajo de Horner es encomiable pero, honestamente, no suena a nada nuevo o alienígena. Es una música bonita y escrita sensacionalmente, pero Horner ha fracasado en este intento de dotar a Avatar de una dimensión musical distinta. Creo que el error ha estado en intentar cargar la música de estos efectos musicales sin dejar que respire, e indudablemente Horner no ha sido capaz de encontrar un «sonido» definitorio para Pandora.
{youtubejw width=»600″ height=»250″}6y_HYlCvzKo{/youtubejw}
Suena ‘The Bioluminescence Of The Night’, de James Horner para Avatar
El otro chasco ha sido más a nivel de aficionado, más que de espectador. Arriba he comentado el problema de Horner con el autoplagio. Los que me leéis en Intermezzo conocéis mi postura al respecto. Creo que Horner está en todo su derecho a reutilizar su música como le venga en gana porque es suya, y es evidente que muchos de sus reciclajes funcionan muy bien ya sean con Heath Ledger como con Brad Pitt en pantalla. Otra cosa es que desde la integridad de un creador de música sea o no rebrobable. Y no nos llevemos a engaños. Avatar (desgraciadamente para algunos) tiene muchos hornerismos. El tema principal se parece mucho al de Las cuatro plumas, algunas de partes vocales y percusivas proceden de Mi gran amigo Joe, el pasaje de acción ‘Scorched Earth’ es muy similar a ciertos tonos de Troya, la música de Glory se puede escuchar en los tracks de los Na’vi, el uso de sintetizadores y voces artificales es muchísimo Titanic, el tema de flautas sale en Braveheart y muchos de los pasajes corales así como instrumentales recuerdan bastante a Apocalipto. Decir esto en realidad es poco, porque la partitura se presta a todo un ejercicio de investigación para aquellos lectores más audaces. Y con todo, quiero apuntar que aquí el que escribe dice esto sin ningún tipo de acritud, porque no pienso derribar en esta crítica la partitura de Avatar por autorreferencias del compositor, porque creo que no es justo. No hay que valorar el contenido por el contexto sino por su capacidad.
El tercer y más grave problema es la falta de creatividad y fuerza temática. La verdad que es bastante inexplicable que Horner dedique casi toda la partitura a crear texturas en vez de temas inolvidables, que es lo que tenía que haber hecho. La primera mitad de la composición es claramente una premisa de bases estilísticas más que un acercamiento a la historia. Se trata de una sucesión de secuencias musicales estelares, unas más oscuras, otras más folclóricas, pero ninguna con rumbo definido. El único tema que obtiene un lugar decididamente destacado es el tema principal (‘Becoming one of the people…’), que es versionado con letra en la canción ‘I see you’ y que se va anotando algún tanto a lo largo del score. Obviamente, esto está buscado y no digo que el hecho de no componer temas melódicos sea o no más o menos apropiado o que haya sido decisión suya. Quizás director y compositor convinieron en no empañar musicalmente el efecto visual de las imágenes por ordenador y utilizar una música más efectista y en segundo plano. El disco se cierra con un bonus track que es una exposición temática de los nuevos sonidos de Avatar y la canción final interpretada por Leona Lewis. Como dije en las predicciones al Oscar de canción, me espanta hasta límites insospechados que ‘I see you’ llegue a los Oscar. ¿Nadie se da cuenta de que Horner ha compuesto una canción como si estuviera a principios de los noventa? Que alguien le diga que esto está pasado. Y mejor, no sepáis inglés porque la letra es un pastelón ridículo.
{youtubejw width=»600″ height=»250″}vWR25O8V5Y0{/youtubejw}
‘I see you’, música de James Horner y Sam Franglen. Letra de Sam Franglen. Voz de Leona Lewis.
Como conclusión diré que James Horner ha compuesto una sólida partitura, bastante coral e instrumentalmente rica, un poco chill-out, que ciertamente da una dimensión a la película. Horner sigue siendo un músico excepcional y su escritura de la música incidental es más que plausible. Sin embargo, esta composición fracasa a la hora de constituirse como una identidad musical y definitoria del filme. El escasísimo enfoque temático es decepcionante como poco. Además, el sonido, por mucho elemento punzante, percusivo o folclórico recargado, acaba por sonar artificial y prefabricado. Y no digamos que suena a «ya escuchado» porque ya me he extendido bastante sobre los hornerismos. En lo que se refiere a premios, James Horner está nominado a los Globos de Oro como mejor partitura y mejor canción, un hecho que no sé si significa ya algo actualmente. El ridículo de todos los grupos de la crítica americana (que han premiado cosas como Crazy Heart, que no tiene partitura, o incluso Nine, que todo el mundo sabe que es un musical de Broadway) es bochornoso. Avatar se erige como la opción más satisfactoria y de consenso de cara a los Oscar. Es la partitura más bombástica del año y Fox está haciendo mucha prensa con ella. Yo apuesto a que ganará el Globo de Oro y desde luego tiene muy en la mano la nominación a los premios de la Academia. Es más, creo que tenemos una favorita para los Oscar porque es muy probable que salga como mejor película, un factor muy determinante para la victoria. Y si a ello le sumamos que sus competidoras probablemente no tengan la fuerza para prestarle batalla porque la Academia tirará por lo previsible, pues A+B=C. Y he de decir que después de todo, no me importa. Porque es un buen score y porque James Horner ha sufrido muchos olvidos de la Academia, y puestos a dar Oscar a cualquiera, como en las ediciones de Santaolalla o Rahman, que se lo den a una figura incuestionable del cine.
LO MEJOR: El sonido Horner y la escritura incidental en general es muy buena y sólida.
LO PEOR: La carencia de esfuerzo temático que acaba por banalizar el conjunto. También la profusión de autorreferencias, muy habituales, y la incapacidad de encontrar un sonido auténtico definitorio para Pandora.
EL TEMA: ‘The Bioluminescence Of The Night’, ‘Becoming One Of The People’ y ‘War’.
Pistas
01. «You Don’t Dream In Cryo….» (06:09) 02. Jake Enters His Avatar World (05:24) 03. Pure Spirits Of The Forest (08:49) 04. The Bioluminescence Of The Night (03:37) 05. Becoming One Of «The People», Becoming One With Neytiri (07:43) 06. Climbing Up «Iknimaya The Path To Heaven» (03:18) 07. Jake’s First Flight (04:50) 08. Scorched Earth (03:32) |
09. Quaritch (05:01) 10. The Destruction Of «Hometree» (06:47) 11. Shutting Down Grace’s Lab (02:47) 12. Gathering All The Na’vi Clans For Battle (05:14) 13. War (11:21) 14. I See You (Theme From Avatar) [performed by Leona Lewis] (04:20) 15. Into The Na’Vi World (Bonus) (1:35) |